Para que sirven las quillas

Esta sección de nuestra Web debería haber sido la primera de todas. Pero nunca es tarde, y finalmente vamos a poder contarles la importancia que tienen las quillas en la practica de nuestro querido deporte. Vamos a tratar en esta sección todos los temas que se nos ocurran y podamos investigar acerca de las quillas, y que sean dignos de compartir con Uds., los lectores ávidos de buena información. Las quillas hacen por nosotros sesión tras sesión de surf, debemos saber lo que las quillas son efectivamente, y no todos lo saben, sin estos pequeños apéndices en forma de aleta de delfín que hay debajo de nuestras tablas, el surf no seria posible de la forma en que lo conocemos hoy en día.
Las quillas son en sí simples apéndices de plástico, resinas o fibra de carbono (según el fabricante) que cumplen tres funciones primordiales al surfear:

· Le permiten a la tabla tener estabilidad direccional en la ola al surcar las paredes de agua en movimiento

· Le dan a la tabla el agarre necesario para no derrapar en la ola («thrust» en ingles significa estocada, empuje. La quilla da una «estocada» en el fluido sobre el que nos deslizamos.)

· Nos da la maniobrabilidad que nos permite llevar la tabla al labio de la ola, al barrel o a la zona del bottom.

Sin las quillas la tabla no tendría dirección, derraparía en la pared de la ola y seria imposible recorrer sus paredes verdes, efectuar maniobras o giros. Esta combinación de funciones es única en el mundo de los deportes náuticos, desde un punto de vista hidrodinámico. Si comparamos la función de las quillas con las de la orza de un barco a vela o tabla de windsurf, vemos que en estos últimos casos la orza ejerce una contrapresión a la que el viento ejerce sobre la vela, y le impiden a la embarcación o la tabla derivar sin dirección. Pero en ninguno de los casos le define la dirección de desplazamiento, que están dadas por el timón, y por la posición de la vela con respecto a la tabla respectivamente… Las quillas en el surf ofrecen la misma estabilidad lateral, y agarre en el agua, combinados además con la direccionalidad dada por cambios de presión ejercidos por el peso del surfista aplicado en diferentes lugares de la tabla. Las quillas en el surf hacen todo el trabajo muchachos.

Historia de las quillas
En los comienzos del surf no existían las quillas: las antiguas Olo boards y Alaia boards – tablas hawaianas de maderas locales que se usaban en las islas originalmente – carecían de ellas. Los primeros diseños de comienzos del siglo XX tampoco incluian quillas: eran tablas hoy llamadas de «cola deslizante». Tom Blake fue el primer surfista-diseñador que introdujo en el año 1935 una quilla en la parte inferior de su tabla. Blake había sufrido un accidente que la había ocasionado graves lesiones en un brazo, y esto le impedía remar con fuerza. Muchos dicen que esto fue lo que lo impulsó a investigar y facilitar la estabilidad de la tabla de surf en el agua. Blake era un experto en aéro e hidrodinámica de la Universidad Tecnológica de California (conocida en la jerga como «CalTech»). Este simple hecho cambio la dirección de la evolución del surf para siempre. En 1966 el australiano Nat Young diseño una quilla denominada como «mágica» y abrió la puerta a la revolución de la tabla corta. Luego fue Mark Richards, otro australiano, quien introdujo las dos quillas paralelas en 1977 (hasta ese momento solo se usaba una quilla), pudiendo ser alcanzados lugares en la ola antes impensados. Y finalmente el señor Simon Anderson a principio de los años 80´s creó lo que se denominó como el «Thruster moderno», es decir la tabla con tres quillas como la mayoría de nosotros las conoce actualmente. Repasando un poco la evolución del surf en los últimos casi 50 años, se puede llegar a la conclusión de que las mejoras de performance logradas a través de los años no se deben al cambio en el tamaño de las tablas, ni a los cambios en su forma, ni a los nuevos materiales.

Texto/Fotos/lostparadise
Fuente/Tresquiellas